Torre Eiffel

La Torre Eiffel es una monumental estructura de hierro localizada en el Campo de Marte de la ciudad de París. Fue diseñada por Gustave Eiffel ingeniero especialista en estructuras metálicas, de quien tomó nombre, en colaboración con otros ingenieros estructurales como Stephen Sauvestre, Maurice Koechlin o Emilie Nouguier, con motivo de la Exposición Universal de 1889. Actualmente es considerada símbolo de la ciudad y de Francia y su monumento más visitado, si bien en sus inicios fue un elemento controvertido y criticado por los artistas e ilustres de la época, debido a su monumental estructura de hierro. En este sentido cabe destacar que en el año 2007 fue el monumento más visitado del mundo, con 6.893 millones de visitantes.

Su altura total es de 324 metros alcanzando los 273 metros de altura en su última planta. Hasta la construcción del Edificio Chrysler en Nueva York, fue la construcción más elevada del mundo. Posteriormente se instaló una antena que haría alcanzar a la torre los 330 metros de altura, desbancando nuevamente al mítico edificio neoyorkino.

La Torre Eiffel se compone esencialmente de tres niveles a dos de los cuales se puede acceder mediante escaleras escondidas en la inmensa estructura metálica. El tercer nivel tan sólo puede ser alcanzado desde un ascensor. En el nivel del suelo podemos encontrar un punto de información sobre la torre entre los pilares Sur y Oeste, una oficina de correos desde la cual mandar postales, un par de tiendas de souvenirs y un buffet, entre otros. Existe también la posibilidad de ver la maquinaria de los ascensores de 1899.  En el primer nivel, situado a 57 metros del suelo y con algunos subniveles, siendo el nivel de mayor superfície, uno puede disfrutar de una galería que permite unas vistas de París de 360º y contiene diversos mapas de orientación y catalejos, así como de un restaurante con vistas hacia el exterior y el interior de la torre, el Altitud 95 y el Cineiffel. Situado a 115 metros por encima del suelo encontramos el segundo nivel, con un mirador acristalado con el fin de evitar caídas y un reputado restaurante con una estrella Michelín, el Le Jules-Verne de decoración sombría y que permanece intacto desde su año de creación, 1983, teniendo reservas de hasta tres meses de antelación debido a su éxito. Se considera que este nivel es el mejor para obtener unas buenas vistas de la ciudad ya que es lo suficientemente alto para evitar fachadas de otros edificios pero no tan alto como para no permitir diferenciar nada. El tercer nivel, el último de la torre y al cual se accede a través de un ascensor desde el segundo nivel, es un nivel destinado a telecomunicaciones y ya históricamente fue usado con dicha finalidad y en él también podemos acceder para observar las diferentes vistas así como una galería cerrada con mapas de orientación o una champagnería. Su plataforma de superfície reducida permite no obstante soportar la presencia simultánea de hasta 400 personas.

El monumental edificio metálico fue construido entre 1887 y 1889 para crear un arco de entrada a la Exposición Universal. Construida con 18.038 elementos de hierro pudelado y medio millón de ribetes creando una estructura abierta con dos plataformas. Para finalizar la estructura fueron necesarios 300 obreros que además pprovocaron diversas huelgas debido a las condiciones de trabajo de riesgo y lo que consideraban, no era un salario adecuado. Tras diversas negociaciones con Eiffel la obra se termina a tiempo para la Exposición. Debido a la expansión térmica del material  la Torre se puede expandir en los días de máximo calor hasta 18 centímetros. La forma de la torre, ancha en su base y esbelta en su parte más elevada es obviamente fruto de evitar los movimientos originados por el viento e incluso moviemientos geológicos.

Los ascensores originales fueron construidos por diversas compañías a destacar la estadounidense Otis con un sistema hidráulico o la francesa Roux Combaluzier Lepape quien también usó el sistema hidráulico así como sistemas de cables y poleas.

Como curiosidad cabe destacar que fue presentada en la Exposición Universal de 1888 en Barcelona y su propuesta rechazada, motivo por el cual el ingeniro Eiffel probó de nuevo suerte en la ciudad de París con un inmejorable final.