La-Rambla

La Rambla de Barcelona es un emblemático paseo del casco antiguo de la ciudad que conecta la Plaza de Catalunya,
centro neurálgico, con el monumento de Cristóbal Colón en el Port Vell (Antiguo puerto de Barcelona).
El paseo, arbolado y con una gran zona peatonal central, discurre a lo largo de su camino hacia el mar pasando por
míticos emplazamientos como el Mercado de la Boquería, el Palacio de la Virreina, el Liceo o las Atarazanas, antiguo astillero medieval de la ciudad, y alberga en su seno multitud de kioskos, floristerías y artistas urbanos. Éstos últimos de tan variada índole como pintores, estatuas humanas o mimos. Hasta hace relativamente poco era también punto de venta de mascotas tales como pájaros o roedores, pero por medidas higiénicas el Ayuntamiento de Barcelona prohibió recientemente este tipo de comercio reconvirtiendo los antiguos puestos de venta en locales de comercio de artículos de regalo o con distintivo de calidad (DO, IGP).

A sus lados podemos encontrar gran variedad de tiendas, bares y restaurantes que hacen de La Rambla un lugar transitado, tanto de día como de noche, y dan un aire más jovial y cosmopolita a la ciudad de Barcelona. Asimismo, en sus inmediaciones encontramos también el Museo de Cera o el Museo Marítimo (en el interior de las Atarazanas). Por su heterogeneidad, la Rambla de Barcelona, de 1,2 km de longitud, se divide en diversos tramos con diferentes nombres. Así, podemos encontrarnos en su zona más alejada del mar, la Rambla de Canaletes, coronada por la fuente con el mismo nombre, pieza clave de la ciudad por ser donde el FC Barcelona celebra sus triunfos. Posteriormente, la Rambla dels Estudis, la Rambla de Sant Josep, la Rambla de Caputxins y Rambla de Santa Mónica, la más cercana al mar, y desde la cual se observa insultante la estatua de Cristóbal Colón.

El paseo central de la Rambla, de baldosas negras y rojas formando una cenefa ondulada que recuerda al mar contiene un mosaico tricolor obra de Joan Miró ubicado justo delante del Liceo, en un emplazamiento llamado Pla de l'Ós. Este clásico del surrealismo catalán, fué instalado el 30 de diciembre de 1976 y es pisado miles de veces al día por turistas poco cautos que no reparan en su presencia. Es pues, una de las pequeñas joyas, aunque no la única, que alberga tan único lugar. Otra de las maravillas que vale la pena remarcar es el edificio de los paraguas, o casa Bruno Cuadras. Se encuentra justo en frente del mercado de la Boquería y fué construida en 1883 por el arquitecto Josep Vilaseca combinando la arquitectura modernista que imperaba en la época en Barcelona, junto con elementos de otras culturas como el gran dragón de su fachada, de estilo oriental.

Finalmente, destacar que las Ramblas separa también dos de los principales barrios turísticos y de mayor contenido cultural de Barcelona, el Raval y el Barrio Gótico, siendo un lugar de obligado paso para cualquier turista que pise la ciudad.